noviembre
Adiestrar a tu perro: enséñale a usar la correa
La correa es uno de los primeros pasos al iniciar el adiestramiento de tu perro. Uno de los momentos más felices en la vida del perro es salir de casa y adentrarse en el mundo exterior. En este momento, nosotros pensamos que el perro quiere ir a pasear, ¡No es así! El paseo es un concepto humano, el perro no sale a pasear, sale de cacería.
Desde su perspectiva, saldrá a cazar, y esa es una de las actividades más importantes y elementales en su vida pues tendrá la oportunidad de proveerle alimentación a su manada.
De hecho, deben haber notado que cuando están en la calle, su perro empieza a oler todo a su paso. Eso significa que está siguiendo rastros, entonces se detiene, se pone alerta y voltea ante el mínimo ruido o movimiento que percibe.
Liderazgo
La clave de tu liderazgo será el control del paseo, por lo que si cuando salimos a pasear, que para el perro significa cazar, le permitimos que tome el control del paseo o cacería. Al dejarlo salir primero, a la velocidad que quiera, parándose, oliendo y orinando todo a su paso le estaremos entregado el liderazgo al perro.
Para lograr tener el control y que el perro quiera caminar a tu lado sin halar la correa, te sugiero que durante 15 días practiques el paseo dentro de casa.
Podrás sacarlo para hacer sus necesidades y dejarle que camine unos 5 minutos ( saldrá para aliviarse y no para pasear).
Enseñarle a usar la correa
• Camina por la casa con él a tu lado
Colócale la correa al perro y embárcate en una caminata por tu hogar. Cada vez que el perro tense la cuerda, te detienes y le pides que regrese.
• Prémialo con palabras suaves o con un bocadillo
Cuando el perro camine a tu lado sin halar la correa, puedes premiarlo con: trocitos de salchicha, jamón, queso o sus galletas favoritas.
Es muy importante que asocie caminar al lado con el premio o gratificación.Por esta razón, es importante que lo premies únicamente cuando camine a tu lado. Evita a toda costa premiarlo cuando tense la cuerda, si lo haces, querrá tensar la correa para que lo premies nuevamente.
• Camina, detente y cambia de dirección
Comunícale en qué dirección deben ir, sincronicen los pasos, si te mueves, él te sigue. Si te detienes, él también lo hará.
Demuéstrale que tienes el control y que él debe dejarse guiar. Es imprescindible no entrar en un forcejeo a ver quien hala más. Eso podría transformarse en un juego para el perro.
• Enséñale a quedarse quieto al abrir la puerta
Una vez que haya logrado quedarse quieto será el momento de salir a la calle.
• No permitas que salga de la casa antes que tú
Una vez en la calle camine normalmente con el perro al lado. Esta acción debe ser igual que como lo hicieron dentro de casa. Si él hala la cuerda, te detienes. Después, lo llamas a tu lado y cuando regrese continúan caminando.
• No permitas que huela y orine por todos lados
Establece un sitio fijo donde pueda hacer sus necesidades.
Si dentro de la casa practicas este ejercicio durante 15 días, sin utilizar la fuerza, el perro aprenderá a caminar a tu lado. Además, querrá hacerlo, ya que asociará que si camina a tu lado recibe un premio. Asimismo, asociará tensar la correa con no recibir el premio y con detenerse. Con paciencia y constancia los resultados se verán más pronto de lo que imaginas, estarás listo para salir a la calle y el paseo será satisfactorio para ambos.
Por: Carlos Betancourt – El hombre que escucha a los perros
